Malditas películas románticas, eso dijo ella al terminar de ver "Love, Rosie". Estaba en uno de esos días que solo las mujeres entendemos, algo así como un combo emocional explosivo, además de estar sola en su cama grande, con insomnio y una pizca de melancolía. Siempre evita ver este tipo de películas porque termina llorando y enojada.
Enojada, porque le genera odio que te hagan seguir creyendo que el amor verdadero existe y que tarde o temprano llega, aunque en la realidad no tiene esa certeza. Y llorando, porque ama que haya un final feliz y le emociona mucho pensar que quizás ella este viviendo su película romántica, en la parte del nudo, y que próximamente va a llegar su desenlace, feliz obvio.
Creció con la idea de que conocería a ese pibe que le generaría mariposas en el estomago, que sería tan perfecto como en sus mejores sueños, que tendría su entrada triunfal, casi heroica, le cambiaría la vida para siempre, y lo mejor de todo que se mantendría con ella para toda la vida.
Hasta ahora, conoció lo que a simple vista parecía que posiblemente había alguna probabilidad de que fueran príncipes, pero después del beso, se transformaron en sapos*, de esos de charco. Y aunque intentara darle otra oportunidad, otro beso, a ver si se volvían a transformar en príncipes, lo único que conseguía era decepción, y la respuesta que lograba elaborar, es que no era la indicada para que ese sapo sea príncipe. Su mayor problema estaba, en que aprendía a querer a los sapos y les costaba dejarlos saltar a otro charco.
Mil veces quiso dejar de creer en el amor eterno, hasta que ve una de estas películas que le revuelven el estomago y la llenan de esperanza. Quizás no consiga su Jerry Maguirre (ojalá que si) pero seguro que va a seguir amando, y tratando de que su historia, sea de esas que merecen llegar al cine, y mantener encendida la chispa de chicas como ella, que por momentos sienten que jamás van a ser amadas.
No sabe como termina su historia, pero mientras tanto, por mas que odie y ame a la vez a estas películas, va a seguir esperando ver el final, ansiosa, con lagrimas en los ojos, soñando que el último beso que pronostica "The end", no signifique el final, si no el comienzo real de su comedia romántica.
*sapo: será utilizado como sinónimo de ´pelotudo´. Sin ofender.
hay que tener cuidado que las mariposas en el estómago no sean nauseas (por los sapos que son algunos) :P
ResponderBorrarese es el problema de las películas románticas:
ResponderBorrartodos se aman, todos se besan, todos cojen felices menos uno.
aguante tonto y retonto.
jajaja, por excelencia la comedia tonta gana al romanticismo esperanzador/deprimente...
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